Blockchain Pública, Privada e Híbrida.

En anteriores entradas de este Blog, realizamos un primer acercamiento al concepto de Blockchain e intentamos hacerlo con el lenguaje más simple posible, entendiendo que la temática es compleja de asimilar ya que nos movemos en un entorno de inmaterialidad y virtualidad, que escapan a los sentidos con los que la naturaleza nos ha provisto. Y, sin embargo, la blockchain está ahí y funciona.

El concepto de trasmisión de valor de manera descentralizada, sin intermediarios validadores, se encontró con un problema de difícil solución durante más de 30 años. Este es el problema del doble gasto, es decir, evitar que un mismo activo pudiera gastarse 2 veces.

Con una autoridad intermediaria y validadora este problema no existe, y si existiera es la propia entidad la encargada de solucionarlo. Pero en ausencia de esta autoridad central, la situación no es sencilla de resolver.

La resolución encontrada al problema del doble gasto es sorprendente por su sencillez, y consiste en aprovechar la capacidad verificadora que tiene la masa cuando trabaja por un objetivo común, como ya explicamos en “Tan simple como Blockchain”.

Pues bien, una vez solucionado este crucial problema, se pone en marcha la primera cadena de bloques exitosa de la historia. La de Bitcoin. Y es pública.

La Blockchain Pública.

Una red como la de Bitcoin permite la participación tanto a nivel usuario, como a nivel de desarrollo de la misma, de todas aquellas personas que lo deseen, por ello es pública. Nadie decide quien puede y quien no puede usarla ya que es completamente descentralizada, no es de nadie y es de todos al mismo tiempo.

Ahora bien, las nuevas mejoras o desarrollos propuestos por los individuos de forma voluntaria, han de ser aprobados por la mayoría de los agentes validadores o nodos. Así como también han de serlo las trasmisiones de activos que se realizan.

Podemos observar en una Blockchain publica 4 características:

  • Las transacciones son transparentes y pueden visualizarse por cualquier individuo, aunque mantienen un cierto anonimato. Es decir, tu observas que alguien mandó dinero a alguien, pero no conoces sus identidades.
  • Cualquier persona puede hacer uso de la red, sin permiso otorgado.
  • Cualquier individuo puede convertirse en nodo validador y, por tanto, competir por las recompensas que el protocolo ofrece a quien realiza este trabajo. (Minería)
  • Dentro de la red, las decisiones se toman por consenso entre los nodos, y por supuesto sin ninguna autoridad central que las autorice o valide.

Esta estructura y características que acabamos de describir hacen que nuestras transacciones de valor sean seguras, inmutables, muy rápidas y económicas. Como vemos el concepto en sí es disruptivo.

Ejemplos de este tipo de blockchains son Bitcoin, Ethereum, Zcash o Monero… entre otras.

La Blockchain Privada.

Las empresas privadas a la hora de tomar sus decisiones estratégicas actúan en realidad de forma muy similar a los individuos.

Si existe una solución que resuelve un problema de manera eficiente y a bajo costo, parece una buena idea analizar si podemos aprovecharnos de ello.

Hasta ahora hemos hablado de Blockchain como una herramienta para la transmisión de valor, pero realmente también puede transmitir y custodiar datos de manera muy eficiente.

No pasó mucho tiempo hasta que empezaron a surgir cadenas de bloques privadas, esto es centralizadas. En las que los usuarios y los desarrolladores solo acceden a ellas mediante invitación de sus propietarios.

Y aunque son criticadas por la comunidad alegando la incoherencia de Blockchain centralizada, hay que decir que es de sentido común que las empresas quieran aprovechar esta eficiente tecnología, sin tener que otorgar el acceso a sus datos a cualquiera.

En estas Blockchains no suele haber minería y el proceso de verificación no se hace por nodos. Ejemplos de Blockchains privadas son: Ripple, Corda y por supuesto Hyperledger (Fundación Linux) con un potencial de desarrollo extraordinario.

La Blockchain Hibrida.

También conocidas como Federadas. Intentan integrar lo mejor de las Blockchains públicas y privadas. Sus características más relevantes son:

  • Tanto el acceso a la red como la propuesta de mejoras se realiza solo por individuos autorizados por el resto de la red. Estos usuarios también se encargan de verificar.

 

  • La información contenida en estas cadenas de bloques es accesible para todo el mundo. Como en las Blockchains públicas.

 

  • Son redes descentralizadas a nivel local o federativo lo que implica más transparencia y seguridad que la Blockchain privada. No se generan monedas y por tanto no hay minería.

 

Por las características de estas cadenas de bloques, parece lógico que la mayoría de sus aplicaciones se estén enfocando en la gestión de la administración pública, así como las relaciones de ésta con los individuos y empresas privadas, ya que proporcionan un nivel de transparencia en la gestión muchas veces anunciado pero pocas veces logrado.

Ejemplos de este tipo de red también lo encontramos en el consorcio Hyperledger o Corda.

Espero y deseo que tras la lectura de este post tengas más claro el potencial de desarrollo que tiene la tecnología Blockchain y como cambiará la forma que tenemos de entender el mundo.

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¡El momento es ahora!

Efrén Arroyo Franco

Criptoro Digital Blog